Hace dos años escribí una entrada donde mencione varias de las cosas que odio de Mexicali, dentro de todas esas cosas mencione a los limpiavidrios, esos tipos con aspecto tecolín (en su mayoría ) que podemos encontrarnos en varios cruceros de Mexicali.
Ya tenía tiempo que no había tenido problema con alguno de ellos, hasta el viernes de la semana pasada, cuando me encontraba circulando por la zona centro de Mexicali de camino a mi trabajo. Llegue a un semáforo y mientras esperaba la luz verde salió un limpiavidrios que estaba parado en la esquina, se acerco al carro que estaba frente a mí y lo bateo la señora, siguió su camino con todas las intenciones de limpiar mi parabrisas recién lavado, le empecé a decir con la mano: No! no! no! no! no! no!.. Y zas!! Que le avienta agua el wey!. Me enoje, baje el vidrio y le grite: “Te dije que no cabrón!!!”.. Agarra la cosa esa para limpiar vidrios, le da un tallón y se va. No manchen!, me lo dejo exactamente como en la imagen que puse arriba, todo rayado y la parte de abajo mojada. Pero no solo eso, me dejo todo chispeado el cofre y el guardafango.
En serio, no tengo nada contra estas personas que tratan de ganarse algo de dinero limpiando vidrios, si lo hacen bien y respetando lo que diga la gente no hay problema, pero gracias a esto que les cuento me caen mal, no hacen caso y les vale madre si les dices que no.
En otra ocasión llegue a un OXXO y en el estacionamiento se encontraba un señor con un trapo en la mano, como no es la primera vez que me encontraba a ese señor ahí, le dije: “No vaya a limpiar mi carro, está limpio”. Entre al OXXO, salgo, y me encuentro al señor disque limpiando mi carro.
Como ya le había dicho que no lo limpiara me hice menso, me fui directo al carro y me subí. Le metí reversa al carro y cuando le quise dar para atrás veo al tipo por el retrovisor parado atrás del carro, baje el vidrio y le dije: “Hágase para un lado, lo voy a atropellar”, pone su mano arriba de la cajuela y me dice: “Saca para un taco, te limpie el carro”, le respondí que ya le había dicho que no lo limpiara y se enojo, se hizo a un lado y mientras me iba yendo me iba mentando la madre, como si yo hubiera tenido la culpa pues!.
Y bueno, esas fueron dos de mis patoaventuras mas recientes, que tengan buen inicio de semana, sobre todo quienes no vamos a trabajar hoy lunes :).
Creo que la única solución para eliminar ese problema es NUNCA darle dinero a la gente que invade los cruceros, porque si están ahí es porque es algo rentable. A veces uno por lástima (o hasta por miedo a los limpia vidrios) les da dinero sin pensar que sólo alimentamos ese círculo vicioso…
Pues lo mismo pasa con las personas que piden dinero en las calles, yo la verdad si los veo con aspecto tecolin no les doy nada, sobre todo si van de parte de un centro de rehabilitación, nunca he confiado en eso.
hasta a mi que no tengo carro
me cagan esos weyes.
Wow! Cuando viví en México Nunca tuve carro. Acá en los US no veo eso.
Creo que sería bueno que cuando vaya me lleve una nave que vuele y estacionarla en el aire para que estos lavavidrios y carros no lo alcancen. j je je.
Saludos! Muy bueno tu post! Me encantó.
Jaja, a ver si venden alas para carro en Ebay XD
DE LO QUE TIENE TU CORAZON HABLA TU BOCA
Puro amor.